Basahatea edo ahate arrunta
(Anas platyrhynchos), gure hezeguneetako hegaztirik ugariena da. Beste ahate
mota batzuetan bezala, dimorfismo sexual handia aurkezten du, hau da, arrak
emeak baino lumaje askoz ikusgarriagoa dauka.
Babesturik
dauden lekuetan egiten dute habia. Hemea, normalean 5-etik 12-ra arteko
arrautzak jartzen dituzte eta 22 egunetik 30 egunetara inkubatzen egoten dira.
Ahatetxoek habia uzten dute arrautzetik irten eta denbora gutxira.
Barakaldoko
Lorategi botanikoan basahateak umatzen dute. Garrantzitsua da haiengandik
distantzia bat mantentzea, haien estresa ekiditeko. Horregatik txakurrak loturik joan behar dira lorategian osoan, baina bereziko laku gertuko eremuan.
El ánade azulón o pato común
(Anas platyrhynchos), es el ave de nuestras zonas húmedas más abundante.
Como en otras especies de pato, presenta un marcado dimorfismo sexual, es
decir, el macho, con el cuello verde, es mucho más vistoso que la hembra que
tiene una discreta coloración de camuflaje.
Suelen
nidificar en un lugar protegido, algunas veces bastante lejos del agua. El nido
suele estar recubierto con pasto seco y pelusa. La hembra pone de 5 a 12 huevos en el comienzo de
la primavera, incubados durante 22
a 30 días. Los patitos dejan el nido poco después de
salir del cascarón. Aprenden rápidamente a buscar alimento por sí mismos,
aunque permanecen cerca de su madre. Aprenden a volar aproximadamente a las 7 a 8 semanas.
En
el Jardín Botánico de Barakaldo anidan varios ánades azulones.
Es importante
mantenerse en una distancia prudencial ya que el acoso al que se les somete
puede ser muy perjudicial para las crías. En este sentido, es importante
recordar que los perros deben ir atados en todo el jardín, pero sobre todo en
la zona del estanque ya que muchas veces se abalanzas sobre los patos, produciéndoles
un duro estrés.
Durante
estos días es muy habitual ver a la gente echándoles pan, muchas veces en
grandes cantidades, al estanque para los patos. Este acto que en un principio
podría considerarse beneficioso para los patos, puede llegar a ser letal,
especialmente para las crías, ya que parte de ese pan no es comido ese mismo
día y pueden quedarse flotando durante varios días, llenándose de
microorganismos dañinos para las aves.